La escuela de Dios (1 Samuel 30-31)

¡Nunca los hombres de David se han rebelado contra su jefe! ¿Qué es lo que pasa ahora? Algunos están hablando de matarle. Tenemos aquí dos clases de hombres: algunos son los fieles de David, que comparten sus ideales y le tienen una feroz lealtad, por ejemplo, sus tres sobrinos, Joab, Asahel y Abisai. El otro grupo lo hemos visto en 1 Samuel 22:2,  Todo el que estaba en apuros, todo el que estaba endeudado y todo el que estaba descontento se unió a él, y él vino a ser jefe sobre ellos. Es decir, gente problemática.

En nuestra labor de evangelización en Madrid hemos visto lo mismo: personas que buscan a Dios de verdad, y luego los buscavidas.

Todos estos han seguido a David y se han enriquecido con el botín de guerra. Pero en cuanto algo sale mal, siempre los hay que se quejan. ¿Qué hace el líder? ¿Te acuerdas que en un momento crítico vino Jonatán y fortaleció a David. Ya no puede, como vamos leyendo. Pero David ha crecido. Mas David se fortaleció en el SEÑOR su Dios (1 Samuel 30:6). Además, él ya tiene la presencia de un sacerdote, a quien puede consultar. Y Dios le hace una garantía. Recuperado el ánimo, David es capaz de seguir siendo el líder de siempre, incluso en otras pruebas que se presentarán.


Si nuestro enemigo el diablo nos ha robado años de vida, pureza y oportunidades, vamos a fortalecernos en él, tomando este texto que se refiere a 1 Samuel 30:8.


Curiosidad: En este mes, Julio de 2019, los arqueólogos ha identificado los restos de la ciudad de Siclag.

C 31 - ¡Qué triste, Saúl y su familia!



Terminado el libro de 1 Samuel, nos convendría hacer unos apuntes de repaso: protagonistas claves, capítulos especiales, lecciones que hemos aprendido. Ya sé que estamos en verano y no apetecen esos trabajos. Pero el verano es tiempo de cosecha y ¿quién no aprovecha su huertecito de tomates, berenjenas, y si tiene viña, las uvas etc? ¡Cosechemos lo que hemos sembrado!