sábado, 12 de enero de 2019

Por fin se arrepiente un rico


12-enero       


2  Y un hombre llamado Zaqueo, que era jefe de los recaudadores de impuestos y era rico,
3  trataba de ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, ya que él era de pequeña estatura.
4  Y corriendo delante, se subió a un sicómoro para verle, porque Jesús estaba a punto de pasar por allí.
5  Cuando Jesús llegó al lugar, miró hacia arriba y le dijo: Zaqueo, date prisa y desciende, porque hoy debo quedarme en tu casa.
6  Entonces él se apresuró a descender y le recibió con gozo.
7  Y al ver esto, todos murmuraban, diciendo: Ha ido a hospedarse con un hombre pecador.
8  Y Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes daré a los pobres, y si en algo he defraudado a alguno, se lo restituiré cuadruplicado.
9  Y Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa, ya que él también es hijo de Abraham;
10  porque el Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo que se había perdido.

Lucas 19:11-27
11  Estando ellos oyendo estas cosas, continuando Jesús, dijo una parábola, porque El estaba cerca de Jerusalén y ellos pensaban que el reino de Dios iba a aparecer de un momento a otro.
12  Por eso dijo: Cierto hombre de familia noble fue a un país lejano a recibir un reino para sí y después volver.
13  Y llamando a diez de sus siervos, les dio diez minas y les dijo: "Negociad con esto hasta que yo regrese."
14  Pero sus ciudadanos lo odiaban, y enviaron una delegación tras él, diciendo: "No queremos que éste reine sobre nosotros."
15  Y sucedió que al regresar él, después de haber recibido el reino, mandó llamar a su presencia a aquellos siervos a los cuales había dado el dinero, para saber lo que habían ganado negociando.
16  Y se presentó el primero, diciendo: "Señor, tu mina ha producido diez minas más."
17  Y él le dijo: "Bien hecho, buen siervo, puesto que has sido fiel en lo muy poco, ten autoridad sobre diez ciudades."
18  Entonces vino el segundo, diciendo: "Tu mina, señor, ha producido cinco minas."
19  Y dijo también a éste: "Y tú vas a estar sobre cinco ciudades."
20  Y vino otro, diciendo: "Señor, aquí está tu mina, que he tenido guardada en un pañuelo;
21  pues te tenía miedo, porque eres un hombre exigente, que recoges lo que no depositaste y siegas lo que no sembraste."
22  El le contestó*: "Siervo inútil, por tus propias palabras te voy a juzgar. ¿Sabías que yo soy un hombre exigente, que recojo lo que no deposité y siego lo que no sembré?
23  "Entonces, ¿por qué no pusiste mi dinero en el banco, y al volver yo, lo hubiera recibido con los intereses?"
24  Y dijo a los que estaban presentes: "Quitadle la mina y dádsela al que tiene las diez minas."
25  Y ellos le dijeron: "Señor, él ya tiene diez minas."
26  Os digo, que a cualquiera que tiene, más le será dado, pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará.
27  Pero a estos mis enemigos, que no querían que reinara sobre ellos, traedlos acá y matadlos delante de mí.


Jesús sigue en Jericó, camino a Jerusalén. Ni Bartimeo (que vimos ayer), ni el de hoy, Zaqueo, pueden clasificarse como normales. Éste es el jefe de los recaudadores al servicio del imperio romano para exprimir a su propio pueblo, los judíos. Hemos visto a algún noble de los judíos apartarse de Jesús con tristeza por no estar dispuesto a apartarse de sus riquezas.

Pero Mr. Z, que reconocía una oportunidad cuando se le ofrecía el puesto de recaudador, ahora reconoce que ha encontrado una inversión infinitamente mejor. No se aparta, se acerca. Siendo un trepa como es, se aprovecha del árbol más cercano. 

Luego Jesús sigue hablando de inversiones y el hecho de que Dios pide cuentas. 

viernes, 11 de enero de 2019

Hacer el ridículo por Jesús


11-enero

Mat 20:29-34
29  Al salir de Jericó, le siguió una gran multitud.
30  Y he aquí, dos ciegos que estaban sentados junto al camino, al oír que Jesús pasaba, gritaron, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!
31  Y la gente los reprendía para que se callaran, pero ellos gritaban más aún, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!
32  Deteniéndose Jesús, los llamó, y dijo: ¿Qué queréis que yo haga por vosotros?
33  Ellos le dijeron*: Señor, deseamos que nuestros ojos sean abiertos.
34  Entonces Jesús, movido a compasión, tocó los ojos de ellos, y al instante recobraron la vista, y le siguieron.

Mar 10:46-52
46  Entonces llegaron* a Jericó. Y cuando salía de Jericó con sus discípulos y una gran multitud, un mendigo ciego llamado Bartimeo, el hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino.
47  Y cuando oyó que era Jesús el Nazareno, comenzó a gritar y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!
48  Y muchos lo reprendían para que se callara, pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!
49  Y Jesús se detuvo y dijo: Llamadle. Y llamaron* al ciego, diciéndole: ¡Anímate! Levántate, que te llama.
50  Y arrojando su manto, se levantó de un salto y fue a Jesús.
51  Y dirigiéndose a él, Jesús le dijo: ¿Qué deseas que haga por ti? Y el ciego le respondió: Raboní, que recobre la vista.
52  Y Jesús le dijo: Vete, tu fe te ha sanado. Y al instante recobró la vista, y le seguía por el camino.            
 Lucas 18:35-43, 19:1
35  Y aconteció que al acercarse a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando.
36  Al oír que pasaba una multitud, preguntaba qué era aquello.
37  Y le informaron que pasaba Jesús de Nazaret.
38  Entonces gritó, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!
39  Y los que iban delante lo reprendían para que se callara; pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!
40  Jesús se detuvo y ordenó que se lo trajeran; y cuando estuvo cerca, le preguntó:
41  ¿Qué deseas que haga por ti? Y él dijo: Señor, que recobre la vista.
42  Jesús entonces le dijo: Recibe la vista, tu fe te ha sanado.
43  Y al instante recobró la vista, y le seguía glorificando a Dios; cuando toda la gente vio aquello, dieron gloria a Dios.
1  Habiendo entrado Jesús en Jericó, pasaba por la ciudad.


Como en el caso del endemoniado de Gadara, algún evangelista menciona 2, y otro se centra en uno principal. Aquí el principal ciego es Bartimeo. Los 3 escritores sinópticos, Mateo, Marcos y Lucas, tienen cada uno su óptica y se enfocan en diferentes detalles. Es recomendable leerlos despacio y formar una imagen mental lo más completo posible. 

Me he fijado en un pequeño detalle que encontramos en Marcos 10:50. ¿Por qué tira su manto al suelo? Tal vez por ir con menos trabas a Jesús. ¿Estará confiado en poder volver viendo y encontrar el manto y saber de qué color era? El manto se lleva cuando uno sale a la calle en el mes de Marzo. Todavía está en la calle. La escena parece un poco ridícula. Pero nada tiene de ridículo lo que sucede después. Ve. Sigue a Jesús. Y si sigue siguiendo llegará a Jerusalén y podrá ver con sus nuevos ojos al rey, el Hijo de David, entrar montado en la ciudad al son de hosannas. 

jueves, 10 de enero de 2019

La muestra


10-enero

Mat 20:20-28
20  Entonces se le acercó la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, postrándose ante El  y pidiéndole algo.
21  Y El le dijo: ¿Qué deseas? Ella le dijo*: Ordena que en tu reino estos dos hijos míos se sienten uno a tu derecha y el otro a tu izquierda.
22  Pero respondiendo Jesús, dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber la copa que yo voy a beber? Ellos le dijeron*: Podemos.
23  El les dijo*: Mi copa ciertamente beberéis, pero sentarse a mi derecha y a mi izquierda no es mío el concederlo, sino que es para quienes ha sido preparado por mi Padre.
24  Al oír esto, los diez se indignaron contra los dos hermanos.
25  Pero Jesús, llamándolos junto a sí, dijo: Sabéis que los gobernantes de los gentiles se enseñorean de ellos, y que los grandes ejercen autoridad sobre ellos.
26  No ha de ser así entre vosotros, sino que el que quiera entre vosotros llegar a ser grande, será vuestro servidor,
27  y el que quiera entre vosotros ser el primero, será vuestro siervo;
28  así como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.

Mar 10:35-45
35  Y se le acercaron* Jacobo y Juan, los dos hijos de Zebedeo, diciéndole: Maestro, queremos que hagas por nosotros lo que te pidamos.
36  Y El les dijo: ¿Qué queréis que haga por vosotros?
37  Ellos le dijeron: Concédenos que en tu gloria nos sentemos uno a tu derecha y el otro a tu izquierda.
38  Pero Jesús les dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber la copa que yo bebo, o ser bautizados con el bautismo con que soy bautizado?
39  Y ellos le dijeron: Podemos. Y Jesús les dijo: La copa que yo bebo, beberéis; y seréis bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado,
40  pero el que os sentéis a mi derecha o a mi izquierda, no es mío el concederlo, sino que es para quienes ha sido preparado.
41  Al oír esto, los diez comenzaron a indignarse contra Jacobo y Juan.
42  Y llamándolos junto a sí, Jesús les dijo*: Sabéis que los que son reconocidos como gobernantes de los gentiles se enseñorean de ellos, y que sus grandes ejercen autoridad sobre ellos.
43  Pero entre vosotros no es así, sino que cualquiera de vosotros que desee llegar a ser grande será vuestro servidor,
44  y cualquiera de vosotros que desee ser el primero será siervo de todos.
45  Porque ni aun el Hijo del Hombre vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.


Ayer vimos que los discípulos no entendían cuando Jesús decía que iba a ser matado. Ahora vemos la muestra de como canalizan esa incomprensión. En su imaginación están viendo un palacio real donde Jesús se sentará en un trono y ellos le acompañarán. Mateo nos informa sobre la iniciativa de la madre de Santiago y Juan. Marcos sólo menciona a los 2 hermanos. Este comité familiar se atreve a solicitar ser los principales virreyes al lado de Jesús. Él explica cómo se consigue eso.

¿Te enfadarías tú también con esos 2 como hicieron los demás apóstoles?

miércoles, 9 de enero de 2019

¿A la tercera va la vencida?

9-enero

Mat 20:1-16
1  Porque el reino de los cielos es semejante a un hacendado que salió muy de mañana para contratar obreros para su viña.
2  Y habiendo convenido con los obreros en un denario al día, los envió a su viña.
3  Y salió como a la hora tercera, y vio parados en la plaza a otros que estaban sin trabajo;
4  y a éstos les dijo: "Id también vosotros a la viña, y os daré lo que sea justo." Y ellos fueron.
5  Volvió a salir como a la hora sexta y a la novena, e hizo lo mismo.
6  Y saliendo como a la hora undécima, encontró a otros parados, y les dijo*: "¿Por qué habéis estado aquí parados todo el día sin trabajar?"
7  Ellos le dijeron*: "Porque nadie nos contrató." El les dijo*: "Id también vosotros a la viña."
8  Y al atardecer, el señor de la viña dijo* a su mayordomo: "Llama a los obreros y págales su jornal, comenzando por los últimos hasta los primeros."
9  Cuando llegaron los que habían sido contratados como a la hora undécima, cada uno recibió un denario.
10  Y cuando llegaron los que fueron contratados primero, pensaban que recibirían más; pero ellos también recibieron un denario cada uno.
11  Y al recibirlo, murmuraban contra el hacendado,
12  diciendo: "Estos últimos han trabajado sólo una hora, pero los has hecho iguales a nosotros que hemos soportado el peso y el calor abrasador del día."
13  Pero respondiendo él, dijo a uno de ellos: "Amigo, no te hago ninguna injusticia; ¿no conviniste conmigo en un denario?
14  "Toma lo que es tuyo, y vete; pero yo quiero darle a este último lo mismo que a ti.
15  "¿No me es lícito hacer lo que quiero con lo que es mío? ¿O es tu ojo malo porque yo soy bueno?"
16  Así, los últimos serán primeros, y los primeros, últimos.

Mat 20:17-19
17  Cuando Jesús iba subiendo a Jerusalén, tomó aparte a los doce discípulos, y por el camino les dijo:
18  He aquí, subimos a Jerusalén, y el Hijo del Hombre será entregado a los principales sacerdotes y escribas, y le condenarán a muerte;
19  y le entregarán a los gentiles para burlarse de El, azotarle y crucificarle, y al tercer día resucitará.    
Mar 10:32-34
32  E iban por el camino subiendo a Jerusalén, y Jesús iba delante de ellos; y estaban perplejos, y los que le seguían tenían miedo. Y tomando aparte de nuevo a los doce, comenzó a decirles lo que le iba a suceder:
33  He aquí, subimos a Jerusalén, y el Hijo del Hombre será entregado a los principales sacerdotes y a los escribas, y le condenarán a muerte y le entregarán a los gentiles.
34  Y se burlarán de El y le escupirán, le azotarán y le matarán, y tres días después resucitará.

Lucas 18:31-34
31  Tomando aparte a los doce, Jesús les dijo: Mirad, subimos a Jerusalén, y se cumplirán todas las cosas que están escritas por medio de los profetas acerca del Hijo del Hombre.
32  Pues será entregado a los gentiles, y será objeto de burla, afrentado y escupido;
33  y después de azotarle, le matarán, y al tercer día resucitará.
34  Pero ellos no comprendieron nada de esto; este dicho les estaba encubierto, y no entendían lo que se les decía. 

Ya han sido 3 veces que Jesús anuncia que va a morir (Marcos 8:31, 9:30-31 y aquí en 10:32-34). ¿Y qué es la reacción de los discípulos? No entienden. ¿Te acuerdas de la reacción de Pedro la primera vez que Jesús lo dice? Trata de que Jesús evite que le maten y Jesús le tiene que decir "Vete de delante de mí, Satanás". A veces no entendemos lo que no queremos. Los discípulos han hecho una imagen de Jesús rey, que tomará Jerusalén al estilo de los antiguos reyes. Pero su reino no es de este mundo. 

Nos resulta muy fácil también diseñar un futuro que evite el sufrimiento, y por lo tanto no entender la enseñanza de Jesús, " "Un siervo no es mayor que su señor." Si me persiguieron a mí, también os perseguirán a vosotros

martes, 8 de enero de 2019

Cómo heredar la vida eterna

8-enero

Mateo 19:16-30            
16  Y he aquí se le acercó uno y dijo: Maestro, ¿qué bien haré para obtener la vida eterna?
17  Y El le dijo: ¿Por qué me preguntas acerca de lo bueno? Sólo Uno es bueno; pero si deseas entrar en la vida, guarda los mandamientos.
18  El le dijo*: ¿Cuáles? Y Jesús respondió: NO MATARAS; NO COMETERÁS ADULTERIO; NO HURTARAS; NO DARÁS FALSO TESTIMONIO;
19  HONRA A tu PADRE Y A tu MADRE; y AMARAS A TU PRÓJIMO COMO A TI MISMO.
20  El joven le dijo*: Todo esto lo he guardado; ¿qué me falta todavía?
21  Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, ve y vende lo que posees y da a los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sígueme.
22  Pero al oír el joven estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes.
23  Y Jesús dijo a sus discípulos: En verdad os digo que es difícil que un rico entre en el reino de los cielos.
24  Y otra vez os digo que es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que el que un rico entre en el reino de Dios.
25  Al oír esto, los discípulos estaban llenos de asombro, y decían: Entonces, ¿quién podrá salvarse?
26  Pero Jesús, mirándolos, les dijo: Para los hombres eso es imposible, pero para Dios todo es posible.
27  Entonces respondiendo Pedro, le dijo: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido; ¿qué, pues, recibiremos?
28  Y Jesús les dijo: En verdad os digo que vosotros que me habéis seguido, en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria, os sentaréis también sobre doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel.
29  Y todo el que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o hijos o tierras por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna.
30  Pero muchos primeros serán últimos, y los últimos, primeros.    

Marcos 10:17-31  
17  Cuando salía para seguir su camino, vino uno corriendo, y arrodillándose delante de El, le preguntó: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?
18  Y Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino sólo uno, Dios.
19  Tú sabes los mandamientos: "NO MATES, NO COMETAS ADULTERIO, NO HURTES, NO DES FALSO TESTIMONIO, no defraudes, HONRA A TU PADRE Y A TU MADRE".
20  Y él le dijo: Maestro, todo esto lo he guardado desde mi juventud.
21  Jesús, mirándolo, lo amó y le dijo: Una cosa te falta: ve y vende cuanto tienes y da a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
22  Pero él, afligido por estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes.
23  Jesús, mirando en derredor, dijo* a sus discípulos: ¡Qué difícil será para los que tienen riquezas entrar en el reino de Dios!
24  Y los discípulos se asombraron de sus palabras. Pero Jesús respondiendo de nuevo, les dijo*: Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios!
25  Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que el que un rico entre en el reino de Dios.
26  Ellos se asombraron aún más, diciendo entre sí: ¿Y quién podrá salvarse?
27  Mirándolos Jesús, dijo*: Para los hombres es imposible, pero no para Dios, porque todas las cosas son posibles para Dios.
28  Entonces Pedro comenzó a decirle: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido.
29  Jesús dijo: En verdad os digo: No hay nadie que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o madre, o padre, o hijos o tierras por causa de mí y por causa del evangelio,
30  que no reciba cien veces más ahora en este tiempo: casas, y hermanos, y hermanas, y madres, e hijos, y tierras junto con persecuciones; y en el siglo venidero, la vida eterna.
31  Pero muchos primeros serán últimos, y los últimos, primeros.     

Lucas 18:18-30
18  Y cierto hombre prominente le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?
19  Jesús le respondió: ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino sólo uno, Dios.
20  Tú sabes los mandamientos: "NO COMETAS ADULTERIO, NO MATES, NO HURTES, NO DES FALSO TESTIMONIO, HONRA A TU PADRE Y A TU MADRE."
21  Y él dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud.
22  Cuando Jesús oyó esto, le dijo: Te falta todavía una cosa; vende todo lo que tienes y reparte entre los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sígueme.
23  Pero al oír esto, se puso muy triste, pues era sumamente rico.
24  Mirándolo Jesús, dijo: ¡Qué difícil es que entren en el reino de Dios los que tienen riquezas!
25  Porque es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que el que un rico entre en el reino de Dios.
26  Los que oyeron esto, dijeron: ¿Y quién podrá salvarse?
27  Y El respondió: Lo imposible para los hombres, es posible para Dios.
28  Y Pedro dijo: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido.
29  Entonces El les dijo: En verdad os digo: no hay nadie que haya dejado casa, o mujer, o hermanos, o padres o hijos por la causa del reino de Dios, 
30 que no reciba mucas veces más en este tiempo, y en el siglo venidero la vida eterna.

Hemos visto hace algunos días que Jesús dice, "Ningún siervo puede servir a dos señores, porque o aborrecerá a uno y amará al otro, o se apegará a uno y despreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.". ¿Cómo podemos saber a quién estamos sirviendo? Un factor es la importancia que le damos. Realmente, en este caso del joven rico, Jesús le está ayudando a saber quién es su señor. Sabemos que se trata de la salvación porque los discípulos preguntan ¿Y quién podrá salvarse?

lunes, 7 de enero de 2019

¿Quién no entra en el Reino de los Cielos?

7-enero

Mat 19:13-15
13  Entonces le trajeron algunos niños para que pusiera las manos sobre ellos y orara; y los discípulos los reprendieron.
14  Pero Jesús dijo: Dejad a los niños, y no les impidáis que vengan a mí, porque de los que son como éstos es el reino de los cielos.
15  Y después de poner las manos sobre ellos, se fue de allí.

Mar 10:13-16
13  Y le traían niños para que los tocara; y los discípulos los reprendieron.
14  Pero cuando Jesús vio esto, se indignó y les dijo: Dejad que los niños vengan a mí; no se lo impidáis, porque de los que son como éstos es el reino de Dios.
15  En verdad os digo: el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él.
16  Y tomándolos en sus brazos, los bendecía, poniendo las manos sobre ellos.

Lucas 18:15-17
15  Y le traían aun a los niños muy pequeños para que los tocara, pero al ver esto los discípulos, los reprendían.
16  Mas Jesús, llamándolos a su lado, dijo: Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis, porque de los que son como éstos es el reino de Dios.
17  En verdad os digo: el que no recibe el reino de Dios como un niño, no entrará en él.


Para entrar de forma más profunda en este texto sobre los niños vamos a entretejer los tres relatos en una sola narrativa: 

Entonces le trajeron algunos niños para que los tocara y pusiera las manos sobre ellos y orara; y los discípulos los reprendieron. Pero cuando Jesús vio esto, se indignó y llamándoles a un lado les dijo: Dejad que los niños vengan a mí; no se lo impidáis, porque de los que son como éstos es el reino de Dios. En verdad os digo: el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él. Y tomándolos en sus brazos, los bendecía, poniendo las manos sobre ellos. Y después de poner las manos sobre ellos, se fue de allí.

Pregunta: ¿Todavía hay niños que quieren venir a Jesús? ¿Se lo estamos facilitando?

domingo, 6 de enero de 2019

El Principio del Principio


Mat 19:1-2    
1  Y aconteció que cuando Jesús terminó estas palabras, partió de Galilea y se fue a la región de Judea, al otro lado del Jordán;
2  y le siguieron grandes multitudes, y los sanó allí.

Mar 10:1
1  Levantándose de allí, Jesús se fue* a la región de Judea y al otro lado del Jordán; y se reunieron* de nuevo las multitudes junto a El, y una vez más, como acostumbraba, les enseñaba.

Mat 19:3-12  
3  Y se acercaron a El algunos fariseos para probarle, diciendo: ¿Es lícito a un hombre divorciarse de su mujer por cualquier motivo?
4  Y respondiendo Jesús, dijo: ¿No habéis leído que aquel que los creó, desde el principio LOS HIZO VARÓN Y HEMBRA,
5  y añadió: "POR ESTA RAZÓN EL HOMBRE DEJARA A su PADRE Y A su MADRE Y SE UNIRÁ A SU MUJER, Y LOS DOS SERÁN UNA SOLA CARNE"?
6  Por consiguiente, ya no son dos, sino una sola carne. Por tanto, lo que Dios ha unido, ningún hombre lo separe.
7  Ellos le dijeron*: Entonces, ¿por qué mandó Moisés DARLE CARTA DE DIVORCIO Y REPUDIARLA?
8  El les dijo*: Por la dureza de vuestro corazón, Moisés os permitió divorciaros de vuestras mujeres; pero no ha sido así desde el principio.
9  Y yo os digo que cualquiera que se divorcie de su mujer, salvo por infidelidad, y se case con otra, comete adulterio.
10  Los discípulos le dijeron*: Si así es la relación del hombre con su mujer, no conviene casarse.
11  Pero El les dijo: No todos pueden aceptar este precepto, sino sólo aquellos a quienes les ha sido dado.
12  Porque hay eunucos que así nacieron desde el seno de su madre, y hay eunucos que fueron hechos eunucos por los hombres, y también hay eunucos que a sí mismos se hicieron eunucos por causa del reino de los cielos. El que pueda aceptar esto, que lo acepte.

Mar 10:2-12
2  Y se le acercaron algunos fariseos, y para ponerle a prueba, le preguntaban si era lícito a un hombre divorciarse de su mujer.
3  Y respondiendo El, les dijo: ¿Qué os mandó Moisés?
4  Y ellos dijeron: Moisés permitió al hombre escribir CARTA DE DIVORCIO Y REPUDIARLA .
5  Pero Jesús les dijo: Por la dureza de vuestro corazón os escribió este mandamiento.
6  Pero desde el principio de la creación, Dios LOS HIZO VARÓN Y HEMBRA.
7  POR ESTA RAZÓN EL HOMBRE DEJARA A SU PADRE Y A SU MADRE,
8  Y LOS DOS SERÁN UNA SOLA CARNE; por consiguiente, ya no son dos, sino una sola carne.
9  Por tanto, lo que Dios ha unido, ningún hombre lo separe.
10  Y ya en la casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre esto.
11  Y El les dijo*: Cualquiera que se divorcie de su mujer y se case con otra, comete adulterio contra ella;
12  y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.


A través de la Biblia Dios está tratando con la humanidad en la condición en qué se encuentra. Tenemos el gran ejemplo del Sermón del Monte. Hasta ese punto tenían la ley de Moisés. Pero ahora ha llegado Jesús y la escena está preparada para otro nuevo avance. Jesús dice, "Habéis oído... pero yo os digo". Para entender qué es lo que Dios quiere, se utiliza la ley de primera mención. La primera mención de la relación entre hombre y mujer se encuentra en el mismo relato de la creación. No se trataba de un hombre con un harem de mujeres como sucedía más adelante. Son Adán y Eva, un hombre y una mujer. Jesús está usando la ley de primera mención cuando dice, "Desde el principio de la creación, Dios hizo Varón y Hembra". Es decir, un principio para entender la voluntad de Dios es volver al principio. Por eso, a la ley de primera mención le llamo el principio del principio. 

Lo mismo que se aplica la ley de primera mención al matrimonio, se podría aplicar también a la Iglesia. En el principio de la iglesia, el día de Pentecostés, no había nombres como Primera Iglesia del Arrepentimiento, o Iglesia del Bautismo por Inmersión, etc. Era la iglesia y punto.  

Lo cual me recuerda algo que sucedió el 5 de enero. Pero hace muchos años, casi 500. Martín Lutero y otros reformadores hicieron un intento de formar una iglesia más bíblica. El Resultado fue la Iglesia Reformada, la Iglesia Luterana, la Iglesia Protestante, además de la Iglesia Católica. Todas estas iglesias eran iglesias del estado. Pero en Zurich, Suiza, algunos seguidores del reformador Zwingli pensaban que ser cristiano significaba se seguidor de Jesús y no de unos políticos. Aunque estaba prohibido comenzaban a reunirse y decidieron volverse a bautizar. Por esta desobediencia fueron ejecutados. El primero en sufrir esta condena fue Felix Manz, el 5 de enero de 1527. Su historia se encuentra aquí. Así tenemos ya Católicos, Ortodoxos, Protestantes, Anabaptistas (los que bautizaban a creyentes y no bebés).

Sabemos que uno es cristiano, no por pertenecer a un grupo, sino por tener fe en Jesús. Como al principio. Dentro de cada grupo hay creyentes auténticos y falsos. Pero por sus frutos los conoceréis. Como al principio.