Para mi nieta Lydia, que acaba de cumplir años, he seleccionado Jeremías 1:8, No tengas miedo de nadie, pues yo estaré contigo para protegerte. Yo, el Señor, doy mi palabra (Versión DHHe).
El Dolor, el Dilema y la Disposición y la Decisión de Dios.
Vamos a hacer el esfuerzo de tratar de entender el dilema y el dolor de Dios. Dolor de un marido que sufre la flagrante infidelidad de su esposa. Realmente, son 2: Israel y Judá, desde que en tiempos del hijo de Salomón se formaron 2 naciones. Las primeras palabras de Dios a Israel son, "vuélvete" (3:12). Eso es el corazón de Dios hacia un pueblo infiel. Y su Dilema es cómo volverlos a atraer. Eso es el mensaje de todos los profetas, "Israel, vuélvete a tu Dios".
¿Qué harías tú con un pueblo así?
La Disposición de Dios es de no abandonar nunca a su esposa, su pueblo. Esto es para mí uno de los mensajes más tiernos de la Biblia, el amor de Dios no tiene fin. Un Dios dispuesto a sacrificar a su Hijo por recuperar a un pueblo rebelde.
La Decisión de Dios, en un sentido, es hacer lo que viene haciendo siempre: quedarse con los pocos fieles y cultivar entre ellos su pueblo. Menciona en el 3:14 a 2 de cada clan, por ejemplo. Como hizo con Noé, y luego con Abraham, separándole del resto de los pueblos. Se trata de un remanente, que aparece más de 50 veces en los profetas. Lo hace también Jesús cuando describe el camino estrecho. Lo menciona Pablo también en Romanos 9:27 y 11:5.
Lo vemos también en todas las familias cristianas y todas las iglesia: gente que se aparta y gente que se quiere volver, y muchos que están pero no lo son.
Curiosamente, cuando el pueblo de Israel abandona a su Dios, no solamente comienzan un culto idolátrico, sino también violencia, inmoralidad y rapiña. ¡Y los profetas dice, volveos, porque si no, pasarán tiempos terribles.
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