La historia detrás de la historia

    Durante 12 días vamos a leer los 34 capítulos de Deuteronomio, comenzando hoy con Deuteronomio 1-3. Parece que serán unos 15 minutos por día. Súmale unos 15 minutos tomando apuntes y media hora orando sobre los temas que tienes sobre el corazón, o que te sugiere la lectura, y has invertido una hora que dará fruto por la eternidad. El nombre significa algo así como "repetición de la ley". Los 10 mandamientos dados en Éxodo 20 se vuelven a enfocar en Deuteronomio 5. 

    En el 1:1 el libro se presenta como discurso que comparte Moisés, haciendo un repaso de la peregrinación del pueblo. Tengo ganas de sumergirme en esta historia. Tiene unos textos memorables y me he elegido alguno para aprender de memoria. 

    En este video de 6 minutos verás las divisiones principales del libro. Y mencionan 2 palabras claves. ¿Cuáles son?

https://youtu.be/lq36F3b-S2U

    ¿Por qué se menciona en el c. 1 seis veces al pueblo amorreo? No tienen nada que ver con amor. Es interesante lo que dice Dios a Abraham sobre este grupo, que él tiene en la mirilla. Al comienzo son amigos y aliados de Abraham. Pero el Señor ve que están irremediablemente encaminados a la maldad total. Génesis 15:16 - Después de cuatro generaciones, tus descendientes regresarán a este lugar, porque todavía no ha llegado al colmo la maldad de los amorreos. 

    Jacob en la bendición de sus hijos los menciona. Ha batallado con ellos, no de forma física, sino haciendo la guerra espiritual contra las huestes satánicas. Jacob para Jose: A ti te he dado más que a tus hermanos: te doy Siquem, que les quité a los amorreos luchando contra ellos (Génesis 48:22). Ésta es la historia detrás de la historia. Deuteronomio en este repaso de las peregrinaciones de Israel incluye detalles que no se encuentran en los tres libros anteriores. 

    Ha llegado ese momento de asegurar el fin de este pueblo. Son de los más peligrosos para Israel, no por su ferocidad para la guerra, sino por la maldad con que pueden contaminar al pueblo de Dios. 

    Entre los amorreos hay gigantes (como por ejemplo el rey Og en el 3:1), de la misma índole que Dios decidió destruir con el diluvio. Los Nefilim, que parece que se van reproduciendo en familias. Se dedican a la guerra, como Goliat de los filisteos. Por eso Saúl le dice a David,   –No puedes ir tú solo a luchar contra ese filisteo, porque aún eres muy joven. En cambio, él es hombre de guerra desde su juventud (1 Samuel 17:33).

    Me he extendido en esta introducción porque creo que aquí hay cosas claves para nuestra guerra espiritual. También tenemos en el video de arriba 2 palabras claves para entender el mensaje que Moisés comparte aquí con su pueblo.

    El c. 2 refresca la memoria de la bendición de Dios en toda su peregrinación.

    

Pensamiento para hoy: ¿Con qué amenazas se enfrenta mi familia, sobre todo mis hijos y nietos? ¿Qué gigantes bloquean su camino? Hay que comenzar a hacer oración de guerra contra estos gigantes, como hacía Jacob en sus 17 años en Egipto.

No luchamos contra carne y sangre... (Efesios 6)