Aperitivo (Lectura mínima) Gálatas 1:1-9
Menú completo Gálatas 1
En los cuentos de Narnia, de C.S. Lewis, los héroes al final son traicionados y vencidos y encerrados en una choza. En esta parábola de la batalla espiritual, una vez dentro, se encuentran en un lugar maravilloso donde todos sus deseos se cumplen. Pero hay otro grupo de personas allí dentro, los enanos, que sólo son capaces de verse en un sucio establo. Es imposible ayudarles porque en su propia mente han decidido que la realidad es así. Empezaron bien porque también pelearon contra los enemigos malignos, pero al final ellos son sus propios peores enemigos porque han fabricado su propia realidad.
La epístola a los gálatas va dirigida a unos enanos en la fe que están fabricando su propia realidad y en el proceso rechazan la abundancia que Dios les ofrece. Se han alejado de Dios (1:6) para seguir un evangelio diferente. Han comenzado por el Espíritu para acabar en la carne (3:3) Se han esclavizado (5:1). Se han desconectado de Cristo (5:4). De seguir así, resulta en vano la muerte de Cristo (2:21).
Lo que nos está enseñando Pablo a nosotros también es la elección entre lo que hizo Cristo por nosotros y lo que pudiéramos fabricar por nuestra cuenta. Todas las religiones tienen su sistema de mérito, y sufrimos la tentación de agradar a los hombres (1:10) para situarnos con los demás, ser una religión más. Pero en el evangelio el único mérito es de Jesús.
Para reforzar su caso, Pablo tiene que demostrar su autoridad, así que en este libro aprendemos detalles biográficos muy interesantes sobre el apóstol. Sobre todo, que lo que él enseña viene directamente de Dios (1:12).
¿He intentado ganar un cachito de cielo hoy, o he recibido lo que Jesús ganó por mí?
No hay comentarios:
Publicar un comentario