martes, 15 de febrero de 2011

Un punto de comienzo

Vitaminas                            Romanos 12:1
Menú completo                  Romanos 12
    Una vez estaba enseñando sobre Romanos 12 e hice la pregunta, ¿qué significa presentar nuestro cuerpo a Dios? Una joven contestó que se trata de nuestro “cuerpo espiritual”. No sé exactamente qué significado tendría eso, pero evidentemente ella no entendía o no quería entender que este cuerpo físico puede ser un instrumento de Dios y que para que lo sea necesitamos presentarlo a él.
    Esto es un capítulo breve. Lo puedes leer en 4 minutos o menos. Pero fíjate primero en las primeras tres palabras, “por lo tanto” o según la versión que usas, "por consiguiente", etc. Se trata de una pequeña partícula gramatical que es clave en la lógica de Pablo. La utiliza 49 veces en el libro de Romanos. Significa, “debido a lo anterior”. Podríamos decir que si quieres que todo ese gran poder y sabiduría de Dios funcionen a tu favor, hay una condición. Tienes que presentar tu cuerpo a Dios. Jesús lo hizo. 
    Ofreció su cuerpo para nuestra salvación. María su madre es ejemplo de ofrecer su cuerpo diciendo, “hágase conmigo conforme a tu palabra. Es posible que alguna mujer por comodidad se niegue a tener hijos. Es posible que por comodidad algún hombre no colabore en las labores de evangelización. El ofrecer nuestro cuerpo tendrá aspectos concretos. Hay muchas formas de reservar el cuerpo y no entregarlo. La chica que mencioné antes, llevó un chico a la cama y luego dijo que estaba embarazada, que no era cierto, para obligarle al matrimonio.
    En este capítulo vienen muchas cosas que forman parte de la vida cristiana. No intentes hacerlas si no has hecho esa ofrenda primero. Ofrece tu cuerpo. Es racional. Es un culto a Dios.
¿He realizado mi culto hoy? (Lucas 9:23)

No hay comentarios:

Publicar un comentario