martes, 1 de enero de 2019

(2 Tesalonicenses 3)


Cuando Pablo pide oración son peticiones serias. Aquí en el v 1 refleja lo mismo que menciona a los efesios. Orad también por mí, para que Dios me dé las palabras que debo decir, y para que pueda hablar con valor y dar así a conocer el designio secreto de Dios contenido en el evangelio (Efesios 6:19). Quiere que los hermanos sientan la necesidad de que el Evangelio llegue con poder a todos los rincones. Debemos pedir lo mismo por la obra de Dios aquí en Extremadura. 

“Orad por nosotros”

3:1- Por último, hermanos, orad por nosotros, para que el mensaje del Señor llegue pronto a todas partes y sea recibido con estima, como sucedió entre vosotros. 2- Orad también para que Dios nos libre de los hombres malos y perversos, porque no todos tienen fe. 3- Pero el Señor es fiel, y os mantendrá firmes y os protegerá del mal. 4- En el Señor tenemos confianza en que vosotros hacéis y seguiréis haciendo lo que os hemos ordenado. 5- Que el Señor os ayude a amar como Dios ama y a tener en el sufrimiento la fortaleza de Cristo.

El deber de trabajar

6- Hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo os ordenamos que os apartéis de todo hermano que no quiera trabajar ni viva de acuerdo con las enseñanzas que os hemos trasmitido. 7- Ya sabéis cómo debéis vivir para seguir nuestro ejemplo: nosotros no hemos vivido entre vosotros sin trabajar 8- ni hemos comido el pan de nadie sin pagarlo. Al contrario, trabajamos y luchamos día y noche para no serle una carga a ninguno de vosotros. 9- Y aunque ciertamente teníamos el derecho de pediros que nos ayudaseis, trabajamos para daros un ejemplo a seguir. 10- Estando aún entre vosotros os dimos esta regla: quien no quiera trabajar, que tampoco coma. 11- Pero hemos sabido que algunos de vosotros viven sin trabajar, muy ocupados en no hacer nada. 12- A estos mandamos y encargamos, por la autoridad del Señor Jesucristo, que trabajen tranquilamente para ganarse la vida.

La iglesia es una entidad potente. Servimos al Creador de la tierra, que al primer hombre dio un trabajo digno. Éste es el mismo Dios que garantiza (Mateo 6:33) que haciendo su voluntad tendremos provisión para las necesidades básicas. Y un elemento de esa voluntad, según nos enseña Pablo aquí, es que no estemos ociosos. Es un tema que él no quiere que olviden porque ya dijo en la carta anterior que deberían trabajar con las manos (1 Tesalonicenses 4:11). A lo mejor hubo un elemento en esa iglesia que piensan mucho en la venida de Jesús y no en vivir una vida útil. La solución de Pablo, si no quieren trabajar, que no coman. ¿Y si no hay trabajo? Ahí es donde el cristiano tiene una actitud diferente de los demás. 

Me acuerdo, viajando de Villanueva a Jaraíz, que recogí un joven en la carretera. Iba a presentarse en el paro. Era una temporada de muchos trabajos en el campo y le pregunté qué tipo de trabajo podía hacer. Se había preparado para la agricultura. Pero me explicó que los únicos trabajos que él aceptaba eran del ayuntamiento en la jardinería. No le interesaba trabajar en el campo cuando podía cobrar el paro. Los cristianos no pensamos así. Yo admiro a as personas que, en esta zona donde hay tantos campos fértiles abandonados, trabajan en lo que sea y no se esmeran en vivir del cuento. 

¿Te has fijado que hay temas muy prácticos en el Evangelio? A Dios no le importa meterse en nuestra vida. Haciéndole caso seríamos una sociedad modélica, seríamos la luz del mundo. 

13- Hermanos, no os canséis de hacer el bien. 14- Si alguno no hace caso a lo que decimos en esta carta, fijaos en quién es y no os juntéis con él, para que se avergüence. 15- Pero no lo tengáis por enemigo, sino aconsejadle como a hermano.

Despedida

16- Y que el mismo Señor de paz os dé paz en todo tiempo y en todas las ocasiones. Que el Señor esté con todos vosotros. 17- Yo, Pablo, os escribo este saludo de mi propio puño y letra. Así firmo todas mis cartas. Así escribo. 18- Que nuestro Señor Jesucristo derrame su gracia sobre todos vosotros.

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