El grano de mostaza

02-Enero

Lucas 17:1-10

1  Y Jesús dijo a sus discípulos: Es inevitable que vengan tropiezos, pero ¡ay de aquel por quien vienen!

2  Mejor le sería si se le colgara una piedra de molino al cuello y fuera arrojado al mar, que hacer tropezar a uno de estos pequeños.

3  ¡Tened cuidado! Si tu hermano peca, repréndelo; y si se arrepiente, perdónalo.

4  Y si peca contra ti siete veces al día, y vuelve a ti siete veces, diciendo: "Me arrepiento", perdónalo.

5  Y los apóstoles dijeron al Señor: ¡Auméntanos la fe!

6  Entonces el Señor dijo: Si tuvierais fe como un grano de mostaza, diríais a este sicómoro: "Desarráigate y plántate en el mar." Y os obedecería.

Mat 17:20  Y El les dijo*: Por vuestra poca fe; porque en verdad os digo que si tenéis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: "Pásate de aquí allá", y se pasará; y nada os será imposible. 

Mat 21:21  Respondiendo Jesús, les dijo: En verdad os digo que si tenéis fe y no dudáis, no sólo haréis lo de la higuera, sino que aun si decís a este monte: "Quítate y échate al mar", así sucederá. 

Mar 9:23  Jesús le dijo: "¿Cómo si tú puedes?" Todas las cosas son posibles para el que cree. 

Mar 11:22  Y Jesús respondió*, diciéndoles: Tened fe en Dios. 

Mar 11:23  En verdad os digo que cualquiera que diga a este monte: "Quítate y arrójate al mar", y no dude en su corazón, sino crea que lo que dice va a suceder, le será concedido. 

Mar 11:24  Por eso os digo que todas las cosas por las que oréis y pidáis, creed que ya las habéis recibido, y os serán concedidas . 

7  ¿Quién de vosotros tiene un siervo arando o pastoreando ovejas, y cuando regresa del campo, le dice: "Ven enseguida y siéntate a comer"?

8  ¿No le dirá más bien: "Prepárame algo para cenar, y vístete adecuadamente, y sírvame hasta que haya comido y bebido; y después comerás y beberás tú"?

9  ¿Acaso le da las gracias al siervo porque hizo lo que se le ordenó?

10  Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que se os ha ordenado, decid: "Siervos inútiles somos; hemos hecho sólo lo que debíamos haber hecho."

El Señor llamó a un hombre en Inglaterra para demostrar lo que es tener fe como un grano de mostaza. Jorge Muller, en un tiempo cuando no había subvenciones, quiso poner a prueba lo que Dios dice, y empezó a ofrecer un hogar para huérfanos, llegando a miles. Para asegurar que todo venía del Señor se negó a pedir dinero a las personas, sólo al Señor en oración.

Él apuntaba detalladamente las peticiones que había presentado al Señor, con sus respuestas, testificando que eran miles de oraciones contestadas. 

Una de sus prácticas era basar todas sus peticiones en lo que dice Dios en su Palabra. A veces pasaba varios días investigando la Biblia para ver si había una promesa que podía aplicar a su situación en concreto. Entonces, con el dedo sobre ese texto en su Biblia, pedía a Dios el cumplimiento.