Muchos pájaros (cerdos) con un tiro

El endemoniado y los cerdos - Mateo 8:28-34; Mar 5:1-20; Lucas 8:26-39

     ¡Qué buena noticia! Toda la ciudad salió al encuentro de Jesús (Mateo 8:34). Sus milagros siempre son motivo de atracción ¿verdad? Pero ¡un momento! La ciudad de Gadara es diferente. ¿Por qué han venido? "Por favor Jesús, vete de aquí." ¿No están contentos por la curación de los endemoniados, que eran una molestia y un peligro para todos? Lucas (v 37) dice que estaban poseídos de gran temor. ¿Será un temor a perder más cerdos, ganado prohibido a los judíos? (Gadara formaba parte de la provincia judía de Perea). La pérdida de una piara de 2.000 sería un golpe considerable a su economía.

     En la economía de Jesús no hay golpes en vano. Lo aprovecha todo para sus fines. Hasta los demonios le pueden servir. Pero en esta gran oportunidad para el pueblo, sólo hay beneficios para los que estaban peores, bajo el control de los demonios. Jesús no insiste en quedar entre los que no le quieren. Pero sí deja un testigo. Es uno de ellos. Vuelve a tu casa, y cuenta cuán grandes cosas Dios ha hecho por ti. Y él se fue, proclamando por toda la ciudad cuán grandes cosas Jesús había hecho por él.

     Realmente ese pueblo no perdió nada cuando saltaron los cerdos por el barranco. Es posible que Dios haya eliminado algo de tu vida que para ti tenía cierto valor, pero sabes que ha sido un estorbo para tu relación con él. Acéptalo y deja que Jesús siga haciendo limpieza. Sus golpes son certeros. Sólo va a quitar lo que estorba tu progreso espiritual.