Sepamos el tesoro que tenemos (Hebreos 1)

A través de los 13 capítulos del libro de Hebreos nos damos cuenta que los creyentes a los que va dirigido están en una situación precaria. Hay mucha presión para que abandonen su fe. Y el autor va sumando motivos por mantenerse fieles.

¿Es posible encontrar a cristianos hoy en el mismo peligro? ¿Se tambalean, y con un pequeño empujón se caerán? Desde luego, en occidente la situación no es como en los tiempos de Roma, cuando por ser cristiano podías poder hasta la vida. Los enemigos de la fe se muestran de otras maneras. De hecho, a veces se describe Europa como un continente pos-cristiano. La fe no se toma en serio. Muchos se han declarado ateos. Otros se van inventando su propia espiritualidad, o siguen a algún gurú oriental. También es diferente la situación europea en que muchos que antes se llamaban cristianos nunca tuvieron una fe personal, nunca conocieron la nueva vida en Cristo; todo era tradiciones.

Necesitamos el mensaje del libro de Hebreos para saber apreciar el tesoro que tenemos en Cristo. En esta lectura de un capítulo diario vamos a seguir el bosquejo que nos da este video de 10 minutos. Una pregunta que se contesta es ¿Por qué se compara a Jesús con los ángeles, y qué texto del Antiguo Testamento nos ayuda a entender la respuesta a esta pregunta? 

Entre auténticos cristianos hoy, tanto en España como en Canadá, yo diría que la generación joven se enfrenta a un gran peligro de apartarse de la iglesia. ¿Motivos? A veces no les convence el nivel de fe de sus padres. A veces ven grandes fallos en los responsables de la iglesia. A veces es por lo que pone en Mateo 13:22, que son engañados por los placeres y la tentación de riquezas, y lo tiran todo por la borda. Vamos a buscar en el libro de Hebreos cómo aplicar estas enseñanzas a nuestra vida y cómo avisar a otros del peligro que representa el abandono de la fe. 

INTRODUCCIÓN

Dios ha hablado por medio de su Hijo

1:1- En otros tiempos habló Dios a nuestros antepasados muchas veces y de muchas maneras por medio de los profetas. 2- Ahora, en estos tiempos últimos, nos ha hablado por su Hijo, mediante el cual creó los mundos y al cual ha hecho heredero de todas las cosas. 3- Él es el resplandor glorioso de Dios, la imagen misma del ser de Dios; y es él quien sostiene todas las cosas con su palabra poderosa. Después de limpiarnos de nuestros pecados se ha sentado en el cielo, a la derecha del trono de Dios. 4- Así el Hijo de Dios ha llegado a ser superior a los ángeles, pues ha recibido en herencia un título mucho más alto que el de ellos.

I. LA SUPERIORIDAD DEL HIJO DE DIOS

El Hijo, superior a los ángeles

5- Porque Dios nunca dijo a ningún ángel:

“Tú eres mi Hijo, yo te he engendrado hoy.”

Ni tampoco dijo de ningún ángel:

“Yo seré un padre para él y él será un hijo para mí.”

6- En cambio, en otro lugar, al presentar a su Hijo primogénito en el mundo, ordena:

“Que todos los ángeles de Dios lo adoren.”

7- Dios dice respecto de los ángeles:

“Hace que sus ángeles sean como vientos y como llamas de fuego sus servidores.”

8- Pero respecto del Hijo afirma:

“Tu reinado, oh Dios, es eterno y es un reinado de justicia. 9- Has amado lo bueno y odiado lo malo; por eso te ha escogido Dios, tu Dios, y te ha colmado de alegría más que a tus compañeros.”

10- También dice:

“Tú, oh Señor, afirmaste la tierra desde el principio; tú mismo hiciste el cielo. 11- Todo ello dejará de ser, pero tú permaneces para siempre.Todo ello se envejecerá como la ropa, 12- ¡lo doblarás como se dobla un vestido, lo cambiarás como quien se cambia de ropa! Pero tú eres el mismo, tu vida no tiene fin.”

13- Dios nunca dijo a ninguno de sus ángeles:

“Siéntate a mi derecha hasta que yo haga de tus enemigos el estrado de tus pies.”

14- Porque todos los ángeles son espíritus al servicio de Dios, enviados en ayuda de quienes han de recibir en herencia la salvación.

¿Cómo nos ayuda este capítulo a ayudar a cristianos que están tambaleando, a que en vez de abandonar su fe en Cristo, renuevan su dedicación a él? Personalmente, encuentro aquí una visión histórica, desde la creación hasta Jesús. Esgrimiendo bien la espada del Espíritu podemos con este texto sagrado demostrar a estas personas que en el amplio mundo espiritual Jesús es superior a todos los demás seres y merecedor de nuestra lealtad y obediencia.

(No olvidemos que también los que abandonan la fe, muchas veces han visto un mal ejemplo en los que se llaman cristianos, incluso en su propia familia. Renovemos nuestra propia relación con Cristo, con el fin de no poner tropiezo a ningún cristiano débil)