jueves, 14 de octubre de 2021

Un buen método de enseñar


Vitaminas (Lectura mínima):  Mateo 14:22-32   
Menú completo:  Mateo 14

    Hay un pensamiento que algunas veces me hace callar. Cuando veo que alguien va mal aconsejado en un área de su vida, sería fácil soltar una parrafada de “buenos consejos” y darle la solución definitiva. Pero si se trata de un área de mi vida donde no estoy practicando esos consejos, me veo sin autoridad para asesorar a otros.

    Jesús quiere enseñar a los discípulos sobre el poder de la fe. ¿Qué es lo que hace? Primero se aparta para orar y fortalecerse personalmente (14:23). Luego da una enseñanza sin palabras. Cuando se recuperan del susto de verle andando sobre el mar, alguien le quiere imitar.

    Si quieres ayudar a alguien de verdad con buenos consejos, antes de hablarle, déjale ver tu ejemplo y después tus palabras.

    Si mis hijos han decidido practicar lo que les he enseñado, es porque eso concuerda con lo que han visto en la práctica. Y los fallos que han visto en mí, los perdonan porque reconocen que sus padres también están en el camino de aprender.

Cuando doy consejos, ¿me aseguro de haberlos practicado?


No hay comentarios:

Publicar un comentario