Lectura
Los salmos de David están llenos de reconocimiento de que sus victorias se debían a la ayuda del Señor y no a su superioridad militar. Sus descendientes hubiesen hecho bien en aprender esta verdad. El pueblo de Dios está mejor con el Señor y sin aliados humanos que con los mejores refuerzos humanos. Esto sería verdad en el caso de Israel hoy día también. Y para nosotros.
jueves, 29 de agosto de 2019
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