domingo, 13 de mayo de 2012

Poniendo las cosas en su sitio


Vitaminas (Lectura mínima)    Hebreos 1:1-4
Menú completo                    Hebreos 1

Cuando se cuestiona si algún grupo que se llaman “cristianos” son verdaderamente bíblicos, lo primero que hay que determinar es el lugar que dan a Jesucristo. Sabemos que Cristo voluntariamente asumió forma humana y se humilló (Filipenses 2) hasta la muerte; debido a eso es la intención de Dios que él sea exaltado sobre todas las cosas. De modo que no nos podemos equivocar en darle demasiado gloria a Cristo pero sí en asignarle cualquier lugar inferior.

El libro de Hebreos es un toque de atención respecto al peligro de perder lo que ya se ha ganado. Está lleno de doctrina cristiana. El conocimiento doctrinal siempre tiene que ver con la práctica. Estos cristianos, a los que va dirigido el escrito que llamamos “Hebreos” estaban en peligro de alejarse de Cristo dando importancia a otras cosas y prácticas.

El 1:8 tiene una expresión inequívoca: Tu trono O Dios. El trono de Dios es ocupado por Jesucristo. Esto también es un tema muy práctico. No es suficiente decir que Jesús es Dios, sino asegurar de que reine en todo aspecto de mi vida. Entonces las cosas estarán en su sitio. Esto quiere decir que cuando leemos los evangelios, cada verdad que allí encontramos es para practicar en serio. Si nuestro rey fue a la cruz por nosotros, nuestra obediencia no tendrá límites.
¿Estoy practicando lo que conozco?

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